SCAAVO lleva a cabo importantes labores de mantenimiento en sus instalaciones
Estos trabajos vienen a mejorar los procesos de producción que se realizan en la Cooperativa
La Sociedad Cooperativa Andaluza Agrícola Virgen de la Oliva SCAAVO está inmersa en un proceso de mejora y modernización. Así, actualmente se están llevando a cabo importantes labores de mantenimiento en sus instalaciones, un trabajo totalmente necesario con el objetivo de mejorar la eficiencia y la producción de la Cooperativa.
En primer lugar, se han cambiado depósitos de vino que no se utilizaban desde hace más de una década, por depósitos nuevos. Estos cuentan con cabeza refrigerada y permiten diferenciar la uva por variedades. De este modo, según cómo se encuentre el mercado en cada momento, se podrá hacer ensamblaje de vinos, nuevos coupage, comercializarlo como mono varietal o envasarlo.
De hecho, uno de los principales objetivos es poder embotellar una mayor cantidad de vino, ya que esta acción aporta valor añadido. Y es que, los vinos de Bodegas Carpe Diem tienen la suficiente calidad como para competir a buen nivel en el mercado. No obstante, como ha señalado el director de SCAAVO, Germán Luna, “para dicha comercialización es necesario la asistencia a ferias, networking y otras actividades de posicionamiento en el mercado”.
Por otro lado, se va a cambiar una línea de embotellado, con más de 25 años, por dos líneas nuevas: una de vinos tranquilos, que permitirá llegar a producciones de 2000 botellas por hora, y otra de vinos espumosos y frizzante, con una producción de 1000 botellas por hora. De este modo, se podrán embotellar directamente los vinos de Bodegas Carpe Diem, al mismo tiempo que se reducen gastos. Además, a nuestros socios no les afecta económicamente, ya que mediante las subvenciones obtenidas y la venta de los depósitos se han cubierto los gastos de las nuevas líneas.
También cabe destacar que la nave Málaga ha pasado por un proceso de reestructuración. En esta línea, se ha creado una zona de albero para los vinos, así como una sacristía para guardar los vinos con más solera, ideal para la venta de los mismos cuando se realicen visitas enoturísticas.
En cuanto a la sección de aderezo, se está llevando a cabo la obra para la ubicación de dos máquinas selectoras de morado. Estas máquinas, con visión artificial, detectan si una aceituna llega verde o con un tono más morado, en cuyo caso se expulsan del circuito. No obstante, esta aceituna tendrá un gran valor añadido, ya que será aceituna del mes de octubre, que se manda a molino para aceite. Con estas dos selectoras se podrá alargar el verdeo entre 15 o 20 días, a una media de 120 mil kilogramos, lo que aportará más de 1’5 millones más de kilogramos.
Así, se cumple con el objetivo de reducir la estacionalidad, es decir, el socio que se dedique a la agricultura podrá comenzar a trabajar en julio con la viña, seguir con el verdeo en septiembre y continuar con la almazara en diciembre. Luna ha explicado que “de este modo aportamos entre 6 o 7 meses de trabajo, que repercuten en jornales que ayudan a anclar el trabajo y las personas en el medio rural” a lo que ha añadido que “Mollina es un pueblo agricultor del que nos sentimos muy orgullosos y por el que tenemos que mirar”.
Respecto a la sección de almazara, se está trabajando en un proyecto para la nueva almazara que se va a proyectar a un plan director de 15 años mínimo. Para ello, se pretende ingeniar una bodega de 1’5 millones de kilos de aceite, actualmente estamos en 500 mil kilos. Además, se pondrán dos líneas para extracción y una de repaso, con la posibilidad de aumentar a una cuarta línea. De hecho, una de las líneas servirá para el uso en ecológico del aceite, dando así servicio a los agricultores que han apostado por el régimen ecológico.
Por último, cabe señalar que también se está estudiando la posibilidad de instalar placas solares en toda la cubierta de la Cooperativa para ayudar a disminuir la huella de carbono, así como a mostrar nuestro compromiso con la sostenibilidad y el cuidado del medioambiente.